Tan solo otro y me pongo a trabajar
Que la desdicha que la ficha que se traga
Esta maquinita tragaperras
de mi cabeza
No escatime los esfuerzos por rajar
Que no se note que si escribo y me desgrano
Entre notas de un piano que no encaja
Por la puertas del país de los colgados
Con la misma idiosincrasia que me embarga
Con la piel de un tambor desconsolado
Y al abrigo de una dulce melodía
Sobran capas, sobran risas, sobran ciegos
Un tahúr que busca el agua entre petardos
Y mirando de reojo entre las vistas
Nunca está de más tener sombrero
Por si llega la ocasión de poder quitárselo
No hay comentarios:
Publicar un comentario