Compra un buen disfraz,
Un disfraz que siempre sonría
Un disfraz que te disfrace como alegre trompetista
En un feria
Un disfraz cuya gomilla apreté
Las sienes
E impida que afloren tus instintos animales
Que coagule la sangre que se enerva
Y que calcule cada tensión que sube
A tu cabeza
Un disfraz de superhéroe
Con su capa, su malla de acero
Que retenga corazones
Las salidas de montones de aguijones
Que atraviesan cada día el montacargas
De la vida
Un disfraz restaurador de los matices
Que amilane cuando sales
A la calle y te consterne aquellas frases
Que se escuchan y te duelen
Un disfraz que no se quite
Que convenza al más pintado
Al más listo y al más inteligente
Que recargue en la mañana
Y el café de sobremesa
Con el fondo y la manera
Del que avisa
Un disfraz sin pantomimas
Sin papeles ni memorias
Que se amolde tanto a tu persona
Que te llegue aquel momento en el que no se pueda distinguir
Dónde acaba el traje y donde empiezas tú
Búscate un buen disfraz,
Tu que sales a la calle con la rareza
Del que sabe que lo que hace no es común
Y que piensa que pierde el tiempo
Entre jaleos que no llenan casi a nadie
Ni se entienden ni se quieren
Ni se muestran
Búscate un buen disfraz,
Tú que anhelas desahogo
Y con miedo ya no gritas
Si no es en tu escondite
Donde sin llorar te balanceas
Con la suma de unos sueños
Que se alejan y se desvanecen
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